Una cafetera industrial es el corazón de cualquier negocio de cafetería, restaurante u oficina con muchos amantes del café. Si ese corazón late con restos de café viejo, leche pegada o cal acumulada, el resultado no solo es un espresso mediocre, sino también un problema de higiene. La limpieza no es una opción; es parte del mantenimiento esencial.

Cuando no se realiza una limpieza regular, los aceites del café y los residuos de leche comienzan a fermentar. Esto genera sabores amargos y desagradables que afectan la experiencia del cliente y la reputación del local. Además, pueden desarrollarse bacterias o moho en zonas húmedas como el vaporizador o la bandeja recolectora.

También es una cuestión de costos. Un equipo bien mantenido dura más, requiere menos reparaciones y ofrece un rendimiento constante. Si querés que tu cafetera sea tu aliada diaria, cuidala como se merece.

Materiales y productos imprescindibles para una limpieza profesional

No alcanza con agua caliente y buena voluntad. Limpiar una cafetera industrial correctamente requiere productos específicos que eliminen grasa, cal y residuos sin dañar los componentes internos.

Entre los productos más usados están los detergentes para cafetera como Cafiza o Puly Caff, especialmente diseñados para disolver aceites y restos de café. Para eliminar la cal, necesitás un descalcificador líquido o en pastillas. Además, es clave contar con un filtro ciego (para hacer retrolavado), cepillos de cerdas duras, paños de microfibra, guantes y, si es posible, agua filtrada.

No te olvides de la seguridad: algunos productos pueden ser corrosivos o irritantes para la piel. Usá guantes de goma y evitá inhalar vapores cuando trabajes con descalcificadores.

Rutina diaria: Higiene rápida tras cada servicio

Como en cualquier cocina profesional, la limpieza diaria no se negocia. Cada día, al finalizar el turno o antes de cerrar, hay que realizar una rutina básica para mantener la cafetera en condiciones y evitar acumulaciones.

Comenzá enjuagando los portafiltros y cestas de filtro bajo agua caliente para eliminar residuos de café. Limpiá la bandeja recolectora, el vaporizador (purgando vapor y limpiándolo con un paño húmedo) y el grupo de extracción con agua. Muchos baristas también hacen una extracción “en vacío” (sin café) para limpiar los conductos.

Con esta rutina sencilla, evitás que los restos se cocinen, se endurezcan o fermenten al otro día. Y, más importante, garantizás que cada café sepa como debe saber: fresco y balanceado.

Mantenimiento semanal: Limpieza profunda con retrolavado y blackflush

Una vez por semana (o cada 3-4 días si el uso es intensivo), la cafetera necesita una limpieza interna profunda. Esta tarea se hace con un filtro ciego, que bloquea la salida del portafiltro y permite que el agua y el detergente circulen hacia adentro del grupo.

Este proceso, conocido como “blackflush” o retrolavado, elimina aceites acumulados dentro del sistema. Colocá el filtro ciego con detergente, activá el grupo por 10 segundos y descansá 10 más. Repetí unas 5 veces. Luego, enjuagá todo el sistema con sólo agua para eliminar restos del producto.

No olvides desmontar los portafiltros, cestas y duchas del grupo para limpiarlos por separado. Un cepillo para grupo es ideal para remover residuos en las juntas o zonas más escondidas.

Descalcificación: Cómo y cuándo eliminar la cal en profundidad

El agua dura (rica en minerales) deja restos de cal que pueden bloquear los conductos internos y afectar la presión o la temperatura. Para combatir esto, la cafetera necesita ser descalcificada de forma periódica, dependiendo de la calidad del agua de tu zona.

Usá un descalcificador profesional siguiendo las instrucciones del fabricante. Generalmente, se mezcla con agua y se hace circular por todo el sistema. Luego se deja actuar y se enjuaga varias veces para eliminar completamente cualquier residuo.

Este proceso no se hace todas las semanas, pero conviene realizarlo cada 1 o 2 meses, especialmente si no se utiliza agua filtrada. Además de proteger el equipo, mejora el rendimiento térmico y asegura una extracción más estable.

Revisión mensual: Desmontaje, inspección y mantenimiento de juntas

Cada mes, tomáte un rato para hacer una revisión completa. Desmontá duchas, filtros, portafiltros, tapas del vaporizador y otras piezas que suelen acumular residuos o grasa. Limpiá con productos desengrasantes y cepillos.

Este también es un buen momento para inspeccionar juntas y empaques. Si ves que están secos, agrietados o deformados, es hora de cambiarlos. Una junta en mal estado puede causar fugas, pérdida de presión o incluso daños mayores.

Lubricar las partes móviles o ajustar tornillos flojos también entra dentro del mantenimiento mensual. Esta rutina ayuda a prevenir fallos mayores y mantiene la cafetera funcionando como el primer día.

Consejos para prolongar la vida útil

La mejor limpieza es la que se hace con regularidad y prevención. Por eso, siempre que puedas, usá agua filtrada para minimizar la formación de cal y residuos. Además, incorporá en tu calendario semanal los días de limpieza profunda y mensual.

Existen también pastillas limpiadoras automáticas (como las de Krups o Jura) que simplifican la limpieza de ciertos modelos. Solo hay que colocarlas en el grupo y dejar que el sistema haga su magia. ¡Tecnología al rescate!

Finalmente, guardá un registro de mantenimiento. Anotar cada limpieza profunda, descalcificación o recambio de pieza puede parecer exagerado, pero en la práctica te permite anticipar problemas, planificar compras y evitar interrupciones.

Porque una cafetera limpia no solo hace buen café: también habla bien de vos y de tu negocio.

Fundada en 1924 por Don José Álvarez, Lainex ha sido pionera en la fabricación de máquinas y molinos de café. Desde sus inicios con un torno a pedal, la empresa ha evolucionado para ofrecer soluciones innovadoras que combinan tradición y tecnología. Hoy, Lainex es sinónimo de excelencia en el mundo del café, apoyando a baristas y amantes del café con equipos de alta calidad diseñados para transformar cada grano en una experiencia única.